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Artista cabudareña Lileska Díaz tiene su espacio en el Museo de Arte Contemporáneo de Caracas

Con "punto de fuga" celebró sus 33 años de arte.

Con la individual de la artista visual de Cabudare, estado Lara, Norkys Lileska Díaz Montilla fue inaugurada la nueva sala “Punto de Fuga” del Museo de Arte Contemporáneo Armando Reverón de Caracas, iniciándose dicho espacio como una vitrina para los nóveles creadores nacionales.

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Nueva sala “Punto de Fuga”

Esta primera muestra denominada “Lileska Díaz 33 años de Arte” fue instalada el 4 de diciembre del año en curso y forma parte de la promoción de artistas cuyas obras no pertenecen a la colección del museo. La misma estará disponible al público caraqueño de jueves a domingo, de 9 de la mañana hasta las 4 de la tarde.

Por su parte Eseario Sosa, presidente del Instituto de Cultura del Municipio Palavecino (Cabudare) informó que desde la localidad en articulación con la cartera de Cultura, se coordinó la exposición individual de Lileska Diaz a propósito de sus 33 años dedicados a las artes plásticas.

Agradecimiento tras inauguración de nueva sala “Punto de Fuga”

En torno a su muestra, la artista visual comunicó a ÚN que siendo cabudareña de corazón está agradecida con Dios primeramente, y con todas las personas que trabajaron por darle la oportunidad de exponer en la nueva sala “Punto de Fuga”, en el Museo de Arte Contemporáneo a sus 33 años de vida artística, convirtiéndose este hecho en “la excusa perfecta para salir del cascaron” añadió.

Resumió su trayectoria de más de tres décadas acotando: “A medida que fui logrando que la obra comunicara claramente mi sentir y pensar por medio del estudio, las pláticas constantes, inspiración y constancia como rutina, supe que requería espacios donde se proyectara su magia y su luz; es por eso que aspiraba espacios de la categoría del Museo de Arte Contemporáneo Armando Reverón”.

¿En qué se inspira Lileska Díaz para crear?

“En el inicio de cada día, el canto de los pájaros, el cielo azul de mi amada Venezuela” comentó la artista, además de su vinculación a los procesos emocionales que viven las personas, destacando como un ejemplo, lo vivido ante la pandemia por covid 19.

“Me inspiró que vi a muchas personas deprimidas y tristes por situaciones que conocemos y se suma el apego con los seres que ya no viven en nuestro país” describió como uno de sus motivos de expresión artística.

A raíz de esa situación contó que organizó en el 2020 la exposición “Arte Dulce” con la finalidad de rememorar a los que no están en el país “las marcas de su infancia y los que nos quedamos en Venezuela” dijo.

Colores y tendencias

Los colores que utiliza en sus obras se caracterizan por ser el amarillo, rosa, azul, naranja, verde, magenta, colores que a su juicio “nos saquen una sonrisa”.

Especificó que nunca ha pensado en el hecho de que su obra pertenezca a una corriente artística en especial; más sí, habló de sus inspiradores Soto, Cruz Diez, Mercedes Pardo y entre otros Picasso.

Es de las que decide por gusto encerrar algún objeto, cosa, planta dándole un carácter con negro; le gusta la estructura por lo que comparte algunos rasgos del constructivismo. También hace uso del arte pop ya que se inclina por lo abstracto, refiriendo que ahí estaban sus inicios en la pintura, pero que actualmente, “se siente más simple en la expresión” acotó.

Inicios

Díaz Montilla inició sus estudios de artes plásticas en 1989 en la escuela Martin Tovar y Tovar en el estado Lara (Barquisimeto), orientándose por las obras de Rodeliano García, Dino Di Rosa, Cristina Moncada entre otros artistas locales.

Su individual en el Museo de Arte Contemporáneo de Caracas la componen 15 obras en las cuales utiliza variadas técnicas con pintura acrílica, guache, creyones, dibujo textil con líneas de hilo.

Nuevos proyectos

Habló que para el año 2023 tiene previsto seguir afianzando sus prácticas de “yoga creativa” con un salón propio, ya que su misión es poder experimentar “libertad en la enseñanza” indicó. Asimismo se encuentra trabajando para concretar una línea de objetos que se puedan tocar y sentir durante sesiones orientadas y aplicadas por terapeutas, psicólogos, pedagogos o también en gimnasios.

Fuente: ÚN

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